La calidad y las ideas del sector de la moda y los textiles austriacos registran una intensa demanda. Personalidades como Lady Gaga, Rihanna y Michelle Obama visten diseño de etiqueta austriaca.
Austria cuenta con más de 220 empresas textiles con alrededor de 10 000 empleados. La elevada cuota de exportación del 80 % demuestra que los textiles austriacos gozan de una buena reputación en todo el mundo. El paisaje de la moda del país alpino se caracteriza por microempresas, cuyos diseñadores operan en diferentes nichos, con una clara orientación artística, una producción artesanal y el uso de materiales de alta calidad. Muchas marcas y diseñadores austriacos son muy populares en el mercado asiático, donde a los compradores les gusta experimentar, haciendo que el estilo de la moda "vanguardista" austriaca sea especialmente bien recibido.
La moda austriaca posee una larga tradición que se remonta a la monarquía de los Habsburgo. Así es como en 1858 se inaugura en Viena la sastrería de la corte imperial Knize & Co. Con tiendas en Viena, Berlín, Carlsbad y París, fue la primera marca de moda en posicionarse como marca internacional, cuya existencia perdura hasta hoy.
Aunque si hablamos de la prenda austriaca por excelencia que más resuena en el imaginario colectivo por su tradición centenaria, nos referimos al abrigo loden: el compañero fiable que protege contra el viento y la intemperie.
Habrá mucha gente que no sepa que el loden no es la prenda de abrigo, sino el tejido de lana, se dice que usado en el Tirol desde el siglo XI para proteger del viento húmedo y el frío. Gracias a un tratamiento específico, dicho tejido logra repeler el agua y aislar del frío, lo que confiere a estos abrigos sus magníficas prestaciones. Algunas de las marcas más famosas en Austria son Leichtfried, Steiner, Lodenwalker, Steinbock o Bekla. Si bien las propias marcas suelen ofrecen la venta online en sus páginas web, estos abrigos no son demasiados fáciles de encontrar en España: los hay en El Corte Inglés o en tiendas especializadas de caza como Serbal, en Madrid.
Antes de que se acabe el invierto, puede ser la oportunidad ideal para hacerse con esta prenda de gran durabilidad y versatilidad.
